¿Qué pasa cuando un presidente nombra como Ministro de Defensa un general que ha sido incluido en varias listas de terroristas internacionales y la Oficina del Departamento del Tesoro de Control de Activos Extranjeros (OFAC) lo ha incluido en su lista negra por su conexión con los cárteles de la droga?, ¿hay una presunción de culpa cuando un gobierno tiene dentro de sus ministros y alto mando militar a personas señaladas como narcotraficantes y no se abren investigaciones?, ¿Qué tipo de gobierno se encuentra tranquilo siendo mencionado por casi todos los informes serios internacionales en materia de narcotráfico como mayor productor, distribuidor, puente de transito y centro de lavado de drogas y dinero del mercado ilícito, y aun así no aplica una estrategia coordinada y efectiva de control?
El Gobierno del presidente Chávez ha sido bastante tolerante a la operación de grupos relacionados con el negocio de la droga en Venezuela, desde la presunción de culpabilidad de muchos de sus allegados a la decisión de expulsar a la DEA y suspender cualquier proceso coordinado antinarcóticos en el 2005, todo apunta a una complicidad interna dentro del negocio multimillonario del narcotráfico. Venezuela por su ubicación geográfica es perfecta para llegar y atender a los mercados tradicionales del Narcotráfico en Estados Unidos y Europa, también de servir de puente hacia Honduras y África para atender a esos mercados indirectamente, así como es excelente para atender el creciente mercado brasilero y los nuevos mercados en Asia. La suspensión de los acuerdos y cooperación con la DEA da a los carteles amplio margen operativo y la seguridad de no ser deportados o si quiera investigados. Por otro lado la posibilidad de un país petrolero con desorden fiscal abre una brecha inmensa de lavado de capitales producto del negocio de la droga. El control cambiario que opera desde hace 9 años facilita este mercado de divisas para financiamiento oficial y para una serie de negocios que se dan en Venezuela. El control del ejecutivo de todas las instituciones y la militarización de las fronteras permite impunidad y la posible complicidad de funcionarios del gobierno y las fuerzas armadas en un negocio redondo. Sistemáticas denuncias del DAS colombiano, de la DEA y de diversos organismos internacionales o entes encargados del análisis del tema de Narcotráfico coinciden en señalar la importancia de Venezuela en el negocio.
La DEA calcula que pasan por Venezuela 270-290 toneladas métricas de cocaína por año, la cual es producida en Bolivia, Ecuador y Colombia y embarcada en Venezuela para destinos europeos. Ello representa más del 30% de la cocaína producida y distribuida en la región. El paso del estimado de 20 toneladas métricas al comienzo de la administración de Chávez a 270 es un verdadero síntoma de complicidad.
Imagen 2: Rutas de la cocaína
Adam Szubin, director de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, una dependencia encargada de colaborar en la lucha antiterrorista opino en abril de este año que "Hay una tendencia preocupante por lo que está ocurriendo en Venezuela en materia de narcotráfico… “. En septiembre de 2008, el actual ministro de la Defensa de Venezuela y cercano colaborador de Hugo Chávez, Henry Rangel Silva, fue relacionado con delitos de tráfico de drogas de conformidad con la Ley para la Designación de Cabecillas del Narcotráfico en el Extranjero, junto con el Director Funcional del PSUV Ramón Rodríguez Chacín y el exdirector de Inteligencia Militar Hugo Armando Carvajal Barrios. Posteriormente se agregaron cuatro funcionarios más en 2011. El presidente Chávez en lugar de investigar la veracidad de las denuncias decidió ascender a Rangel Silva y nombrarlo Ministro de Defensa. Existe una carta del antiguo Ministro de la defensa Raul Baduel a Chávez en el 2007 denunciando que Rangel Silva estaba directamente involucrado en el uso de la fuerza armada para la exportación de un cargamento de 2.2 toneladas de cocaína procedente de las FARC, custodiada en un cuartel del Ejercito y a ser exportada en aviones militares. De hecho, de acuerdo con Eladio Aponte, un magistrado que se escapo de Venezuela y esta colaborando en estos momentos con la DEA en Estados Unidos, el mismo Chávez le ordenó que se tapara el asunto lo antes posible. Hoy Baduel esta preso y Rangel ascendido y condecorado. Otro preferido de Chávez, el General Cliver Alcalá, comandante de la División Acorazada ha sido denunciado en diversas oportunidades como el responsable directo de la operatividad de los envíos de droga usando la fuerza armada en coordinación con el presidente de la Oficina Nacional Antidrogas, Cnel. Néstor Reverol.
Además haciendo caso omiso, el presidente Chávez aseguró la elección de otro sospechoso de vínculos con el narcotráfico, el ex vicepresidente y gobernador del estado Miranda, Capitán Diosdado Cabello. Cabello es un ex militar que participó en conspiraciones de Chávez comenzando con el grupo guerrillero Movimiento Bolivariano Revolucionario y algunos dicen que es el elemento clave en la relación entre el negocio militar e ilegal. Su cargo como presidente del parlamento le da más poder a la facción militar del movimiento corrupto de Chávez en el país. La posición de Cabello a la cabeza del Partido Unido Socialista de Chávez (PSUV) consolida el poder militar de la elite corrupta ligada a las mafias. Un reportaje del ABC de Madrid de abril de 2012 señala que el presidente Hugo Chavez ha recibido y hecho caso omiso de numerosos informes semanales y reportes con pruebas sobre las operaciones de narcotráfico realizadas en Venezuela y en especial de aquellas llevadas a cabo bajo el control de las fuerzas armadas.
De igual forma existe una extraña coincidencia en los aviones que logran incautar en el exterior y sus rutas, apuntando en su mayoría a Venezuela. En Mali se logro detener un 747 procedente de Venezuela cuando dejaba su carga de cocaína en este país, lo cual indica que un aeropuerto de mayor escala esta siendo utilizado para el transporte de la droga. Es común la noticia de droga incautada en África, Europa y Centroamérica proveniente de Venezuela, el uso de la valija diplomática en Nigeria para el tráfico, el uso de tanqueros de petróleo para el tráfico y la falta de constancia de que las incautaciones de droga son reales y de hecho se destruyen.
Otra cara de la moneda es el uso de Venezuela como país seguro para el lavado de dinero proveniente de negocios ilegales, desde el dinero del narcotráfico a los capitales de países con restricciones internacionales como el caso de Irán o Siria. Hugo Chávez ha sido un activo promotor de Irán y Siria en América Latina y otros líderes de la región, debido a recibir Ahmadinejad, como Daniel Ortega de Nicaragua y Ecuador, Rafael Correa, tienen una similar postura ideológica-autoritario de Chávez. A pesar de menos recursos que Chávez, que pueden ayudar a Chávez en su intento de triangular bancario de Irán, comercial y operaciones de energía en todo el mundo para contrarrestar los efectos inminentes sanciones económicas internacionales contra Ahmadinejad y el régimen de Ali Jamenei. Igual ocurre con el régimen asesino de Bashar al-Assad exportándole diesel y al mismo tiempo ayudándoles a triangular operaciones. Hay cada vez más pruebas del uso de Venezuela como paraíso bancario para regímenes autoritarios, grupos violentos (FARC) o carteles de la droga.
Diversos analistas e instituciones, incluyendo la misma OPEP señalan que la producción de petróleo en Venezuela esta por el orden de los 1.9 millones de barriles diarios, pero las cifras del Gobierno de Venezuela indican que esta sobre los 3 millones de barriles diarios, eso de una diferencia de más de 1.1 millones de barriles diarios, en cualquier gobierno serio esos números no cuadrarían y obviamente no hay conveniencia en inflar las cifras a menos que exista otro negocio que requiera justificar ingresos. El uso de PDVSA (la estatal petrolera) para el lavado de dinero procedente de la droga y de países con prohibiciones (como el caso de Irán) ha sido la tesis más utilizada por diversos analistas. Otros negocios en manos del Estado pueden ser la mampara para otras fuentes de lavado, en lo que pareciera ser el más grande Narcoestado operativo en la actualidad.
Si sumamos a otros países a la ecuación, lo que estamos viendo podría ser uno de los cárteles más grandes de la mafia en el mundo, ayudando no sólo a las FARC y Hezbolá, pero Irán y las mafias rusas y chinas también. Sus constantes protestas a un lado; este cartel llamado ALBA se preocupa menos por la justicia social y la igualdad que sobre el poder y el dinero. Hugo Chávez ha creado cuidadosamente para sí mismo la imagen de un gran latinoamericano "Libertador", pero como la realidad emerge de su "Revolución Bolivariana" como posiblemente uno de los Jefes del Cartel Bolivariano y un gran desafío para el mundo democrático. Son demasiados indicios y preguntas sin contestar.
Es triste ver que los países democráticos se convierten en cómplices de un delito grave contra la democracia, permitiendo a los delincuentes literalmente salirse con la suya.