Monday, December 9, 2019

Tráfico humano y explotación de médicos de la dictadura cubana

 

Articulo publicado en El Tiempo Latino 


OPINIÓN: Tráfico humano y explotación de médicos de la dictadura cubana

Hablamos de una esclavitud en el siglo XXI, donde el trabajo forzado de miles de cubanos contribuye para mantener la corrupción y los lujos de los jerarcas cubanos

El Dr. Carlos Ponce es Senior Lecturer, Columbia University; Senior Fellow, Victims of Communism Memorial Foundation y colaborador de ETL


Por más de 50 años la dictadura cubana ha venido usando una fachada “humanitaria” para encubrir un negocio multimillonario que esconde un sistema de tráfico humano, espionaje y explotación. El gobierno cubano viene impunemente aprovechándose de las limitadas facilidades médicas de muchos países y de compromisos políticos secretos para exportar anualmente más de 50 mil trabajadores de la salud, incluyendo médicos cubanos, a Latinoamérica, África y el Medio Oriente en decenas de países, mientras el sistema de salud de Cuba es un desastre y la gente se muere por falta de atención adecuada.
No es el sentido humanitario lo que impulsa al gobierno de Cuba con el Programa Integral de Salud. Está probado en cada uno de los países donde opera o ha operado este programa que en realidad se trata de una explotación y tráfico de los especialistas en salud cubanos para generar unas ganancias exorbitantes para los jerarcas del régimen.
Las misiones médicas no son más que un enorme mecanismo de recaudación para el régimen castrista. Para maximizar las ganancias, el gobierno cubano se apoya en dos estafas. La primera la sufren sus propios profesionales, a quienes les retienen la mayor parte del salario que paga el país receptor, así como los pone a vivir en condiciones infra-humanas, y la segunda es el cargo de servicios adicionales a los gobiernos para incrementar las ganancias del régimen.

Después de las pruebas contundentes del funcionamiento del programa en Venezuela, Brasil, Ecuador y en otros países, sabemos que los médicos cubanos solo reciben un 25% de lo que cobra el régimen a los gobiernos por ellos. De igual forma sus familias son secuestradas en Cuba para garantizar que estos médicos “cumplan” con sus funciones en los países a los cuales son enviados.

Hablamos de una esclavitud en el siglo XXI, donde el trabajo forzado de miles de cubanos contribuye para mantener la corrupción y los lujos de los jerarcas cubanos.
Un programa que aporta la mitad de los ingresos del gobierno de Cuba por el diferencial en pagos de los médicos, educadores y otros explotados. El envío de profesionales de la salud al exterior responde por once mil millones de dólares de los $14 mil millones que Cuba percibe al año por las exportaciones de bienes y servicios, eso sin contar con otros beneficios adicionales en cuanto a la estructura de espionaje y represión política que aporta otros ingresos adicionales gracias a la fachada del programa de médicos. Además hay que sumar los programas “educativos” en la isla para los cuales los gobiernos envían a estudiantes a graduarse de médicos y el gobierno de Cuba les cobra por cada estudiante.

Dependiendo de la capacidad de pago de cada país, el gobierno cubano cobra entre $1,100 y $8,000 por médico cubano al mes a los países, más los gastos de mantenimiento. El médico recibe un máximo de $400 a $800 al mes, dependiendo del país, que le ayuda a mantenerse como pueda en esa nación y enviar remesas a su familia en Cuba.
La realidad es que el gobierno de Cuba también envía espías y otros funcionarios escondidos dentro de las misiones médicas. Recientemente en Bolivia, de un grupo de 700 supuestos miembros de la misión médica, solo aproximadamente 200 eran realmente médicos; el resto eran operadores políticos del régimen cubano infiltrados en las comunidades colaborando con el control social y espiando a líderes opositores. Caso similar el de Venezuela, donde Cuba mantiene un sistema de espionaje y represión con una cobertura de médicos y especialistas cubanos apoyando al régimen de Nicolás Maduro.

Brasil es un buen ejemplo de la falta de interés del gobierno cubano de ayudar a los países, la oferta del Gobierno de Brasil de compensar directamente a los médicos cubanos con salarios reales de mercado fue rechazada por la dictadura de Cuba. Se ha reportado que se llegó a 18 mil médicos cubanos en Brasil en algunas temporadas. El gobierno cubano cobraba cuatro mil dólares por médico más otros cobros adicionales por el programa “Mais Medicos” y les daba a los galenos $800. Ese esquema le producía al gobierno de Cuba $340 millones anuales. Cuando el gobierno de Brasil hace la oferta de cambio de las condiciones del acuerdo esclavista con la dictadura de Cuba, había 8,500 médicos fijos en diferentes zonas de Brasil. Algunos de ellos se rebelaron contra la dictadura y decidieron quedarse en Brasil y demandar a la Organización Panamericana de Salud (PAHO) y al gobierno de Cuba por tráfico humano.

Como hemos visto en las presentaciones de informes sobre esta probemática, al final lo que se ha encontrado en Brasil es un plan masivo de tráfico humano para beneficio económico de la dictadura de Cuba.

Volviendo al área andina, la sombra de la violencia que vivió Ecuador contó con el apoyo de Cuba y Venezuela para desestabilizar a la democracia. Algunos operadores políticos de la isla caribeña aprovecharon la fachada del programa de médicos para coordinar la violencia. Ha sido una decisión acertada del presidente Lenín Moreno la de terminar con los convenios que mantenía el Ecuador con Cuba desde el 2007 (ese país tenía un estimado de 382 médicos cubanos). Cuba les pagaba a los profesionales 800 dólares de los $2,641 que recibía de Ecuador. Unos $15 millones por año que el gobierno de Cuba recibía en perjuicio de los médicos ecuatorianos.

En Bolivia se repetía la historia: un médico boliviano cobra unos 600 dólares al mes y el gobierno cubano le cobraba $4,000 mensuales al gobierno de Bolivia por los 700 médicos que operaban en el país. La realidad es que de esos setecientos, solo 200 eran realmente profesionales de la salud. Durante los casos de violencia que experimentó Bolivia, nuevamente se vio el intervencionismo del régimen de Cuba y su participación en hechos de insurrección. Era el caso de un país pobre como Bolivia regalando a Cuba 34 millones de dólares por año.

Como hemos visto en denuncias directas de médicos cubanos que trabajaron en Venezuela, se les exigía espiar y además contribuir con coerción y chantaje para que los usuarios de sus servicios votaran por Maduro en las elecciones. Desde el año 2000, decenas de miles de trabajadores cubanos de la salud han sido enviados a cumplir misiones en Venezuela bajo un acuerdo en el que se intercambia atención médica por petróleo. De los 60 mil cubanos que se estima tiene el régimen en Venezuela unos 21 mil trabajan en las “misiones sociales” del dictador Nicolás Maduro, eso le garantiza a Cuba unos 200 mil barriles de petróleo al día y millones de dólares pagados por servicios en los 19 años que viene operando el programa. Allí se muestra la ocupación e intervención de Cuba en Venezuela.

No solamente el régimen de Cuba explota a los médicos cubanos que están en Venezuela, allí los hace sobrevivir con menos de ocho dólares al mes y bolsas de comida conocidas como “Clap”. También los expone permanente a la violencia, violaciones y el crimen. Informes de InSight Crime revelan que los médicos cubanos han sido obligados por la dictadura a dar asistencia a miembros de grupos criminales, bandas y los llamados “pranes”, que resultan heridos en balaceras. Otros reportes indican que los obligan a falsificar informes médicos, reportes y cifras.

Pero Cuba no solamente estafa a los gobiernos de Latinoamérica, muchos países de África y del mundo árabe se han visto involucrados en esta falsa trama “humanitaria”. Recientemente varios reportes desde Qatar indicaban que el gobierno de Cuba cobraba 10 mil dólares mensuales por médico y solo daba a estos $1,000, en un esquema muy lucrativo para el régimen. Similar esquema se desarrolla en Arabia Saudita y en muchos otros países.

El régimen cubano estafa a los médicos con los pagos y los expone a trabajo inhumano. Los médicos deben cumplir un contrato de tres años, sin posibilidad de romperlo, y solo pueden volver a Cuba por razones de extrema gravedad, como la inminente muerte de un familiar directo o una enfermedad peligrosa. Su pasaporte es retenido para evitar que escapen y su familia amenazada en Cuba. El régimen laboral es de servidumbre. Algunos trabajan día por medio en guardias de 24 horas, lo que termina dando como resultado semanas con entre 70 y 90 horas trabajadas. Además, pueden pasar hasta 14 meses ininterrumpidos sin vacaciones. Los tienen viviendo hacinados y con condiciones no dignas para que el régimen pueda ahorrar dinero.

Luego de la terminación del programa de explotación de médicos cubanos en Brasil, El Salvador y Bolivia, el régimen cubano se encuentra buscando otros países a donde seguir exportando a sus esclavos. Nos preocupa profundamente el nuevo esquema de endeudamiento anunciado entre los gobiernos de México y Cuba, pese a que México ha expresado que no existe un programa federal de médicos cubanos, la forma de pago de Cuba a las deudas que asume con los gobiernos es con esclavos para hacer tareas de salud o deporte.

El nuevo gobierno de Uruguay debe también revisar esta estafa de la dictadura cubana y terminar con este programa.
Como hemos visto en las denuncias de cientos de médicos que han participado en el programa, de muchos gobiernos y muchos expertos, el “Programa Integral de Salud” de Cuba son misiones políticas y de beneficio económico para el régimen cubano y que no tienen nada de humanitarias.

Se debe continuar apoyando la documentación y la exposición de este programa en la región. De igual forma hay que apoyar a los médicos y sus familias que han sido parte de un programa de tráfico y explotación humana por parte de un régimen criminal.
Algunas democracias han sido inteligentes en suspender estas misiones. Otros países deben tomar el ejemplo que han dado aquellos que han suspendido un programa inmoral, se debe avanzar a evitar que Cuba continúe con la explotación y corrupción.

Friday, March 22, 2019


OPINIÓN: Nicaragua merece atención


No podemos dejar que el ruido de la crisis de Venezuela calle las voces de auxilio desde Nicaragua.


Por Dr. Carlos E. Ponce, Columnista e Investigador de El Tiempo Latino en casos de Corrupción | 3/20/2019, 12:31 p.m.

Publicado en El Tiempo Latino: http://eltiempolatino.com/news/2019/mar/20/opinion-nicaragua-merece-atencion/

*Ponce es Director para América Latina de Victims of Communism Memorial Foundation y Profesor (Lecturer) Norhteastern University. El presente artículo incluye las opiniones del autor que no representan las opiniones de ninguna de las organizaciones con las cuales está afiliado. Las opiniones expresadas aquí son de entera responsabilidad del autor.

Sin importar las amenazas y la violencia del gobierno, los nicaragüenses siguen manifestando pacíficamente en busca de libertad contra la dictadura comunista de Daniel Ortega. Luego de las protestas masivas del 19 de abril de 2018 y los meses subsiguientes y los más de 500 muertos, miles de perseguidos, exiliados, torturados y cientos de presos políticos de manos de la dictadura sanguinaria, los jóvenes y el pueblo de Nicaragua no se rinden al tirano. Este fin de semana vimos cómo miles de personas tomaron las calles y fueron reprimidos violentamente por la dictadura y apresaron a más de 100 líderes de oposición.

Un régimen que ha expulsado a los organismos internacionales de derechos humanos y va impune luego de grotescas violaciones de derechos humanos de parte de las fuerzas policiales y grupos paramilitares armados comandados por Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo. Ante este escenario la economía ha sufrido y la crisis en el país se extiende.

El régimen de Ortega viene aplicando similares estrategias a las dictaduras de Cuba y Venezuela. Por un lado el control férreo centralizado de todas las instituciones, la persecución a la prensa libre, violencia generalizada, torturas, violencia sexual, desapariciones y muerte. Bajo un discurso de falsas revoluciones “socialistas” y elecciones fraudulentas han tratado de ocultar sus crímenes ante la opinión internacional.

Nuevamente el régimen de Daniel Ortega ha convencido a un bloque de oposición, llamado Alianza Cívica de Nicaragua, a sentarse en una mesa de “negociación” sin condiciones previas. Bajo una supuesta excarcelación de algunos presos políticos, algunos delegados de factores de la oposición se sentaron en varias reuniones con el régimen sin lograr ningún resultado. Los liberados fueron menos de los que se esperara que salieran libres y siguen detenidos en sus casas mientras el gobierno no da muestras de querer ceder en resolver la crisis, adelantar unas elecciones libres y cesar la violencia. Negociaciones similares ha implementado en Venezuela la dictadura por más de 20 años simplemente te para ganar tiempo y bajar la presión internacional.

Y es que la crisis dramática que vive Venezuela ha hecho que la atención de Cuba o Nicaragua baje y estos regímenes aprovechan la oportunidad. La dictadura cubana logró que pasara desapercibido el fraude del 24 de febrero de este año, donde se aprobó una “nueva” Constitución que simplemente extiende la tragedia del pueblo cubano, y al mismo tiempo ha incrementado los arrestos a líderes de la oposición y de movimientos de derechos humanos.

Cuba trata de adaptar su fachada constitucional ante la crisis que les espera con la caída de su benefactor Venezuela y los impactos que tendrá la aplicación del Título III de la ley conocida como la Helms-Burton (Cuban Liberty and Democratic Solidarity) que permite a los ciudadanos y empresas norteamericanas demandar a Cuba por las expropiaciones cometidas por el régimen. Esta ley hasta ahora había sido suspendida pero la Administración Trump ha decidido aplicarla.

Venezuela se mantiene como el mayor benefactor de las dictaduras de Cuba y Nicaragua con millones de dólares prácticamente donados en efectivo y en petróleo. Se señala que existen algunas mafias de lavado de dinero proveniente de tráfico droga y corrupción que opera en los tres países.

Al haber terminado el periodo presidencial dudoso de Nicolás Maduro, el 10 de enero, lo que vemos en Venezuela es una dictadura usurpadora aferrada al poder gracias a la violencia de sus grupos policiales, de seguridad y paramilitares (colectivos), muchos de ellos entrenados en Cuba. El país se encuentra secuestrado por una mafia que basa su poder en actividades ilegales y la fuerza. Pese a que la Constitución de Venezuela señala que a la ausencia del presidente de la república será el presidente del Congreso, Juan Guaidó, quien asume la presidencia, Maduro y su pequeño grupo de colaboradores se niegan a ceder el poder.

La solución a la crisis de Venezuela mediante el arresto y deportación de Nicolás Maduro por crímenes de lesa humanidad o narcotráfico, o cualquier otra solución que permita que Venezuela salga de la pesadilla, va a tener un gran impacto en la búsqueda por la democracia en Cuba y en Nicaragua.

Si bien es importante seguir presionando por la salida de Nicolás Maduro del poder, no se puede bajar la atención a los otros dos países del triángulo autoritario. Se deben incrementar las sanciones a ambos países, en particular a familiares, socios y testaferros de Daniel Ortega, comandantes de la policía, empresarios cercanos al régimen y militares. La Nica Act da la posibilidad de incrementar sanciones efectivas que debiliten al régimen. De igual forma se debe evitar apoyar falsas negociaciones y sobre todo evitar que la Organización de Estados Americanos (OEA) caiga en una nueva trampa de Ortega avalando una supuesta reforma electoral.

Recomendamos que el mandato del Special Envoy to Venezuela debe ser ampliado para incluir Cuba y Nicaragua, así como se le debe dar recursos y personal calificado para atender el cáncer de estas dictaduras totalitarias. Latinoamérica no va a salir de la sombra del totalitarismo si no se le da libertad a Cuba. Se debe avanzar con juicios contra perpetradores de violaciones de derechos humanos, narcotraficantes, blanqueadores de activos y corruptos de esos tres países para vencer la impunidad. No se debe bajar la presión internacional contra estos tres países.

La única salida para Nicaragua debe ser la salida de Daniel Ortega, Rosario Murillo y sus cómplices, no podemos dejar que el ruido de la crisis de Venezuela calle las voces de auxilio desde Nicaragua.

OPINIÓN - Dominica: Autoritarismo Competitivo y Corrupción


Su primer ministro, Roosevelt Skerrit, está estrechamente vinculado con la sangrienta dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela



Por Carlos Ponce, Director para Latinoamerica y el Caribe  de Freedom House | 2/8/2019, 12:18 p.m.

Publicado originalmente en El Tiempo Latino: http://eltiempolatino.com/news/2019/feb/08/opinion-dominica-autoritarismo-corrupcion/

El mejor secreto en el Caribe es Dominica, una pequeña isla de 70.000 habitantes gobernada por el mismo primer ministro por los últimos 15 años mediante dudosas elecciones que han sido altamente criticadas por la Organización de Estados Americanos (OEA).

Su primer ministro, Roosevelt Skerrit, está estrechamente vinculado con la sangrienta dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela y es activo protector de ese régimen en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y en la OEA. La razón de esa protección es simple: millones de dólares en petróleo y muchas dudosas inversiones del régimen de Venezuela, funcionarios y testaferros en Dominica y con su aliado en el poder.

El Sr. Skerrit se ha negado a hacer los cambios electorales necesarios para unas elecciones transparentes y persigue a los líderes de la oposición, muy similar a sus colegas autoritarios de la región. Lo más problemático es su negativa a rendir cuentas del destino de los millones de dólares que se ha recibido de Venezuela y los sospechosos aviones cargados de paquetes que están llegando desde Venezuela.

Dada la vinculación del régimen de Nicolás Maduro con el narcotráfico, la corrupción, grupos terroristas y el lavado de dinero ilegal, son muchas cosas que el gobierno del Sr. Skerrit debe explicar. Existe igual preocupación por los fondos que han llegado desde Venezuela por dos décadas a San Vicente y las Granadinas y cuyo primer ministro Ralph Gonsalves también lleva desde el 2001 en el poder y procura ahora heredárselo a su hijo. Ambos casos demuestran la poca transparencia, posible corrupción con dineros provenientes de actividades ilegales desde Venezuela y la complicidad con el régimen asesino y criminal de Venezuela. Debido a esto, los votos de estas dos islas siempre son para proteger la dictadura de Venezuela en organismos internacionales.

Otro problema adicional de Dominica es la venta de ciudadanías, pasaportes y pasaportes diplomáticos, nos indican diferentes fuentes que se han emitido más de 400 pasaportes diplomáticos para una cancillería que tiene menos de 30 embajadores y funcionarios diplomáticos.



Desde Freedom House se está adelantando una investigación de la posible corrupción en Dominica.

Tuesday, March 12, 2019

OPINION: From Sanctions to the Indictment and Extraction of Nicolas Maduro


OPINION: From Sanctions to the Indictment and Extraction of Nicolas Maduro

Published: 3/10/2019 El Tiempo Latino



*Ponce is the Senior Fellow and Director for Latin American Programs at Victims of Communism Memorial Foundation (VOCMF). He is also a part-time Lecturer at Northeastern University. El Tiempo Latino newspaper Anti-Corruption Source/Columnist.

After the fraudulent and unconstitutional elections on May 20, 2018, which were rejected by the vast majority of democratic countries, Nicolas Maduro ceased to be president of Venezuela on January 10, 2019. The application of the Constitution of Venezuela required the head of the National Assembly, Juan Guaido, to take office as the interim president of Venezuela. Guaido has been recognized as interim president by 50 democratic countries.

However, despite numerous sanctions, national and international pressure, and numerous national and international demonstrations, Nicolas Maduro's regime has refused to relinquish power. The regime is supported by a small group of loyal corrupt soldiers and various violent paramilitary groups.

Unfortunately, traditional strategies to deal with authoritarian regimes do not apply to Venezuela. In Venezuela, rather than a government, there is a criminal structure in power supported by mafias of corruption, drug trafficking, terrorism, and the illegal extraction of minerals. The country is a failed state with a humanitarian crisis that has led millions of people to emigrate in the biggest migration crisis in Latin America.

Many countries do not recognize Maduro as president. The United States has been supporting various democratic forces in Venezuela and the diaspora. Sanctions have been imposed on members of the government, military and related family members, on the oil industry, and on banking transactions. Visas have been eliminated, attempts have been made to send humanitarian aid into the country, and threats made by the USG and other countries against the Maduro regime the regime of Maduro and his collaborators have been clear.

As a solution to the ongoing crisis, several groups recommend military intervention in Venezuela. The problem is that they want the United States to assume the economic, political, and human losses of a military operation. A military intervention in Venezuela will bring major impact in human lives and maybe it will be counterproductive to eliminate the communist seed in Venezuela. Although the Trump administration has announced that all options are open, other alternatives to increase pressure on Maduro's communist bloodthirsty dictatorship merit attention.

Some non-violent alternatives recommended are:

  • Opening of Trials, indictments and Arrest Orders: Continue with the sanctions but raise the pressure by opening trials in the United States and other countries against Nicolas Maduro and military and active officials in the dictatorship. This would allow the issuance of indictments or arrest warrants with the consequent international capture. There is enough evidence in numerous cases already opened against relatives of Maduro and front-people (Testaferros) that indicates money laundering and other crimes in the United States. This is a recommendation that we have taken numerous times to the Department of State, National Security Council, Department of Justice, Congress, Southern Command, Prosecutors and others. In several columns and interviews in El Tiempo Latino, this option has been commented on and various supporting documents have been sent. Our sources indicate that there are several sealed cases at United States courts that included Nicolas Maduro, Cilia Flores, Diosdado Cabello, senior government officials and Venezuelan military. We have been pressing to open them and initiate indictments and arrests. Finally the Department of Justice opened the first case and it is against the Narcoterrorist Tareck Zaidan El Aissami Maddah, former vice president of Maduro and current minister. The door is open and many others are coming. The advantage of these cases is that they are not suspension of visas to the United States or blockades of accounts or confiscation of properties in the United States, we speak of trials and jail time for the drug traffickers, money launder and corrupt individuals from Nicolás Maduro regime. They need to accompany the nephews "narcosobrinos" or Chapo Guzmán in jail.
  • Deportation and Removal: The existence of arrest warrants and subsequent requirements in Interpol requires the deportation of those involved in any country where there is an extradition agreement with the United States. This reduces the mobility of officials of the Maduro regime and its military accomplices. The existence of a failed state sequestered by an individual that lacks legitimacy also allows the implementation of strategies to extract criminals. Numerous processes of extracting war criminals, violators of human rights, and corrupt have been effective in the past in different countries by governments and interested parties. 
  • Increased international pressure to investigate cases of corruption among Venezuelan officials, front men, and Maduro’s relatives and to pursue the prosecution and arrest of the corrupt. The creation of a fund for the recovery of Venezuela with funds and assets seized. 
  • Those responsible for Venezuela's electric chaos should be included in the list of sanctions. 
  • The bonds, promissory notes and financial instruments issued by the dictatorship of Nicolás Maduro without the approval of the National Assembly are null and void and should not be recognized and any commitment signed by Maduro or his accomplices must be null and void.
  • Progress must be made in the prohibition of the sale of weapons and supplies to "control of demonstrations", as well as in the issuance of sanctions to those who transport them. Requirements should be imposed on border countries that prohibit and retain arms shipments to Venezuela. 
  • The actions of individuals of the Cuban regime in Venezuela must be fully investigated and documented, their links with the training of torturers of the security forces in Venezuela, the sending of Cuban military personnel to Venezuela, their participation in crimes against humanity, corruption and drug trafficking in Venezuela. Although Cuba is not part of the International Criminal Court, it processes responsible individuals regardless of nationality, it is a good time for a good case and report of the contribution of these individuals of the Cuban dictatorship in their contribution with the crimes against humanity in Venezuela. 
  • Sanctions placed on the Venezuelan oil industry must include the transit of oil to Cuba and ships with gasoline and solvents to Venezuela. The United States must demand the governments of Trinidad and Tobago, Colombia, Guyana, Curacao, Aruba, and other countries bordering Venezuela to stop oil shipments directed to Cuba from Venezuela and to prevent the passage of ships that transport gasoline and other solvents in violation of sanctions. A clear message must be sent to the operators of different vessels, personnel and insurance companies about the risk of violating US sanctions. 
  • The US government needs to limit the operations of Russian Banks and banks controlled by Maduro regime cronies in different countries and monitor the operations to and from Venezuela. 
  • New sanctions against gold mining and illegal mineral exports from Venezuela to neighboring countries and the collaboration from Turkey selling that blood-gold must be in place to reduce the cash flow to the Maduro regime. 
  • Sanctions should be promoted in other countries of the region. To date, in the Americas, only the United States, Canada, and Panama have imposed sanctions. New country-based sanctions similar to US Global Magnitsky need to be promoted and implemented in LAC countries.
  • There are numerous clandestine airports and border roads in Venezuela that can be used to get the humanitarian aid into the country. Reducing the exposure, including an element of surprise and planning strategically can help alleviate the humanitarian crisis. Numerous faith-based groups can help with the distribution of food and medicines. 
  • Progress must be made in the development of strategies to protect the victims of the humanitarian crisis and crimes against the humanity in Venezuela, such as the gathering of evidence and the advancing of strategies that lead to the immediate implementation of transitional justice and persecution of the perpetrators once the usurpation of Maduro ends. 
When anyone asked me what strategy should be implemented with Venezuela, my recommendation is “everything”, all the options and at the same time to end the tragedy for millions of Venezuelans and the impact in neighboring countries, the perfect storm must be generated to get out of the nightmare.

OPINIÓN: De las Sanciones a la Extracción de Nicolás Maduro y sus Cómplices


Las estrategias tradicionales para lidiar con regímenes autoritarios no aplican del todo a Venezuela

Publicado en: 3/10/2019 El Tiempo Latino


*Ponce es Director para América Latina de Victims of Communism Memorial Foundation y Profesor (Lecturer) Norhteastern University . El presente artículo incluye las opiniones del autor que no representan las opiniones de ninguna de las organizaciones con las cuales está afiliado. Las opiniones expresadas aquí son de entera responsabilidad del autor.


Luego de las elecciones fraudulentas e inconstitucionales del 20 de mayo de 2018, las cuales fueron rechazadas por la gran mayoría de países democráticos, Nicolás Maduro dejó de ser presidente de Venezuela el 10 de enero de 2019. La aplicación de la Constitución de Venezuela llevó a que asumiera el cargo de presidente interino el diputado Juan Guaidó, por ser el presidente de la Asamblea Nacional.

Pese a las numerosas sanciones, presión nacional e internacional y numerosas manifestaciones nacionales e internacionales, el régimen de Nicolás Maduro se ha negado a abandonar el poder y se mantiene gracias a un pequeño grupo de militares narco-corruptos leales y a diversos grupos violentos paramilitares.

Las estrategias tradicionales para lidiar con regímenes autoritarios no aplican del todo a Venezuela. En Venezuela no existe un gobierno sino una estructura criminal en poder apoyada por mafias de corrupción, narcotráfico, terrorismo y extracción ilegal de minerales. Venezuela es un estado fallido con una crisis humanitaria que ha llevado a millones de personas a emigrar, en la mayor crisis migratoria que ha experimentado Latinoamérica en su historia.

Estados Unidos ha venido apoyando a diversas fuerzas democráticas en Venezuela y a la diáspora, se han venido imponiendo sanciones a miembros del gobierno, militares y relacionados, se han impuesto sanciones a la industria petrolera y a las transacciones bancarias, se han eliminado visas, se ha intentado ingresar ayuda humanitaria y se ha amenazado de diversas formas al régimen de Nicolás Maduro y sus colaboradores. Numerosos países han apoyado a Juan Guaidó como presidente interino y desconocen a Maduro como presidente.

Hay diversos grupos que recomiendan una intervención militar en Venezuela, el problema es que pretenden que sea Estados Unidos quien asuma los costos económicos, políticos y de pérdidas humanas de una operación militar mientras los demás países observarán aliviados y luego criticarán. Pese a que la administración de Donald Trump ha anunciado que todas las opciones están abiertas, la opción militar no parece estar en el menú de la semana; todavía existen otras alternativas para incrementar la presión a la dictadura sanguinaria comunista de Nicolás Maduro.

Hemos venido por años apoyando las sanciones personales, las restricciones financieras, aplicación de Global Magnisky, las sanciones en diversos países y otras alternativas para acorralar a la narcodictadura que secuestró a Venezuela.

Algunas alternativas que podemos recomendar ahora son:

• Apertura de Juicios y Órdenes de Arresto: Continuar con las sanciones pero elevar la presión con la apertura de juicios en Estados Unidos y otros países contra Nicolás Maduro, militares y funcionarios activos de la dictadura. Ello permitiría la emisión de órdenes de arresto con la consecuente captura internacional. Hay suficiente evidencia en numerosos casos abiertos contra familiares de Nicolás Maduro y testaferros que dan claros indicios de lavado de dinero y otros crímenes en territorio norteamericano. Esta es una recomendación que hemos llevado en numerosas oportunidades al Departamento de Estado, National Security Council, Departamento de Justicia, Congreso, Comando Sur, Fiscales y otros. En diversas columnas y entrevistas en El Tiempo Latino se ha comentado de esta opción y se han enviado diversos documentos de apoyo. Nuestras fuentes indican que hay varios casos sellados (Sealed) en tribunales de Estados Unidos que incluyen a Nicolas Maduro, Cilia Flores, Diosdado Cabello, altos funcionarios del gobierno y militares venezolanos. Hemos venido presionando para que los abran e inicien las órdenes de arresto. Finalmente el Departamento de Justicia abrió el primer caso y es contra el Narcoterrorista Tareck Zaidan El Aissami Maddah, ex vicepresidente de Maduro y actual ministro. Ya se abrió la puerta y muchos otros están por venir. La ventaja de estos casos es que no son suspensiones de visas a Estados Unidos o bloqueos de cuentas o decomiso de propiedades en Estados Unidos, hablamos de juicios y cárcel para los narcos y corruptos del gobierno de Nicolás Maduro. Se abre un compás de espera para que ayuden a salir de la dictadura o acompañarán en la cárcel a los “narcosobrinos” o al Chapo Guzmán.

• Deportación y Remoción: La existencia de órdenes de arresto y subsecuentes requerimientos en Interpol obliga a la deportación de los implicados de cualquier país donde exista acuerdo de extradición con los Estados Unidos, lo cual reduce la movilidad de los funcionarios del régimen de Maduro y sus cómplices militares. La existencia de un estado fallido secuestrado por un individuo que carece de legitimidad permite también implementar estrategias de extracción de criminales. Numerosos procesos de extracción de criminales de guerra, violadores de derechos humanos y corruptos han sido efectivos en el pasado. En efecto a muchos criminales de guerra y violadores de derechos humanos se les ha extraído de diversos países. Ya la orden de arresto internacional obliga a cualquier país donde viajen a arrestarlos y deportarlos a Estados Unidos.

• Incremento de la presión internacional para la investigación de los casos de corrupción de funcionarios venezolanos, testaferros y familiares, así como el enjuiciamiento y arresto de los corruptos y la creación de un fondo para la recuperación de Venezuela con los fondos y bienes incautados.

• No se pueden aceptar testaferros y ladrones viejos o actuales, no importa si ya salieron de Venezuela, son todos co-responsables. Recomendamos a las fuerzas democráticas en Venezuela cuidarse de las ayudas y los fondos ofrecidos por estos corruptos. Se debe dejar bien claro que todos serán enjuiciados. Se deben revisar las cuentas en España, Rusia, Dubai (Emiratos Árabes), Portugal, Panamá, Perú, Argentina, República Dominicana y en muchos otros países y sancionar a los bancos que han comprado, que se han asociado o que permiten sus operaciones. De igual forma se deben incluir sus nombres en el caso ante la Corte Penal Internacional. Estos son co-responsables de la crisis humanitaria que también es un crimen de lesa humanidad.

• Los responsables del caos eléctrico de Venezuela deben ser incluidos dentro de la lista de sancionados.

• Los bonos, pagarés e instrumentos financieros emitidos por la dictadura de Nicolás Maduro sin aprobación de la Asamblea Nacional son nulos y no deben ser reconocidos y cualquier compromiso firmado por Maduro o sus cómplices debe ser nulo.

• Se debe avanzar en la prohibición de venta de armas y de insumos de “control de manifestaciones” así como en la emisión de sanciones a quienes las transporten. Se deben imponer requisitos a países fronterizos que prohíban y retengan cargamentos de armas hacia Venezuela.

• Se debe investigar y documentar plenamente la actuación de individuos del régimen cubano en Venezuela, su vinculación con el entrenamiento a torturadores de los cuerpos de seguridad en Venezuela, el envío de militares cubanos a Venezuela, su participación en crímenes de lesa humanidad, corrupción y narcotráfico en Venezuela. Si bien Cuba no es parte de la Corte Penal Internacional, la misma procesa a los individuos responsables sin importar la nacionalidad, es un buen momento para un buen caso y reporte de la contribución de estos individuos de la dictadura de Cuba en su contribución con los crímenes de lesa humanidad en Venezuela.

• Las sanciones a la industria petrolera de Venezuela deben incluir el tránsito de petróleo a Cuba y de buques con gasolina y disolventes a Venezuela, Estados Unidos debe exigir a los Gobiernos de Trinidad Tobago, Colombia, Guyana, Antillas Neerlandesas y otros países fronterizos con Venezuela que detengan los cargamentos de petróleo dirigidos a Cuba desde Venezuela e impidan el paso de buques que transportan gasolina y otros disolventes en violación a las sanciones.

• Se debe dejar claro a buques y aeronaves, así como sus tripulaciones que sean contratadas o presten servicios a personas sancionadas por los Estados Unidos que exponen su operación, sus registros y su futuro.

• Recomendamos a los países fronterizos con Venezuela la prohibición de tránsito de aeronaves o buques que transporten a sancionados, oficiales del gobierno usurpador de Nicolás Maduro o a militares de Venezuela.

• Se deben impulsar sanciones en otros países de la región, a la fecha en las Américas solo Estados Unidos, Canadá y Panamá han impuesto sanciones. Hay que impulsar legislaciones en los países similares a la Global Magnisky para facilitar la imposición de sanciones a violadores de derechos humanos y corruptos.

• Se debe avanzar en el cierre de la ruta del oro desde el Arco Minero mediante mayores controles a la compra ilegal en los países fronterizos, categorizar al oro de Venezuela como criminal y sancionar a Turquía por procesarlo y comercializarlo. Se debe prohibir considerar ese oro como parte de las reservas, así como se debe informar a los que lo procesan que están ejerciendo acciones ilegales. Recomendamos legislar en Estados Unidos sobre esta materia e incluir el oro de Venezuela dentro de las sanciones para así frenar el acceso a efectivo de la tiranía.

• La ruta del conflicto no violento pero activo en las calles con manifestaciones permanentes y la activación de los temas sindicales, jóvenes y la presión social debe incrementarse y apoyarse.

• Se debe avanzar en el desarrollo de estrategias de protección a las víctimas, de recolección de evidencias y de avance de estrategias que lleven a la implementación inmediata de Justicia Transicional una vez se logre que cese la usurpación de Nicolás Maduro.

Cuando preguntan qué estrategia se debe abordar con Venezuela, mi recomendación es que se debe hacer todo lo posible por acorralar al régimen, se debe generar la tormenta perfecta para salir de la pesadilla.

Les recordamos que cualquier denuncia la pueden enviar a: ponce@eltiempolatino.org

*El Dr. Carlos E. Ponce es Columnista e Investigador de El Tiempo Latino en casos de Corrupción. Ponce es Director para América Latina de Victims of Communism Memorial Foundation y Profesor (Lecturer) Norhteastern University . El presente artículo incluye las opiniones del autor que no representan las opiniones de ninguna de las organizaciones con las cuales está afiliado. Las opiniones expresadas aquí son de entera responsabilidad del autor.