El anuncio del “Presidente” de Ecuador, Rafael Correa, de revisar la decisión de no ir a reelección es simplemente otra gran pasada dentro del circo que se ha montado en Latinoamérica. Alegando el avance de la derecha en su país, Rafael Correa anunció que reformará la constitución de Ecuador y eliminar restricción constitucional que por ahora le impide buscar un nuevo mandato para así poder presentarse en los comicios de 2017.
Nadie puede dudar de esa reacción de Correa, porque francamente no son democráticos y lo que quieren es llevar su reinado maquillado mientras les dure la vida.
Fue lo mismo en Venezuela donde se modificó la constitución dos veces para satisfacer al tirano y que a pesar de perder un referendo para la última modificación igual siguió insistiendo el difunto dictador de Hugo Chávez hasta que logro el mandato eterno. Enfermo con un cáncer terminal no podía pensar en el país y muere luego de “ganar” de nuevo. Y no tranquilos con eso, ignoran su misma constitución dejan un vacío en la presidencia y luego simplemente nombran a Nicolás Maduro como presidente temporal y nuevamente la violan para que sea candidato y gana mediante un fraude generalizado. Y allí uno se pregunta, electo democráticamente?
En Nicaragua una situación similar, pese a que la Constitución lo prohibía, eso no fue obstáculo para el violador Daniel Ortega y simplemente uso unos jueces con período vencido y cuestionados para “interpretar” la Constitución para permitirle postularse de nuevo. Por supuesto unas elecciones fraudulentas lo llevan nuevamente al poder, y allí estará hasta que finalmente muera el tirano. Y por supuesto que dicen que fue elegido “democráticamente”. Y dirán lo mismo cuando designen en la presidente a Rosario Murillo, la flamante compañera del moribundo revolucionario, como una fórmula hereditaria presidencial.
En Bolivia, pese a que el accionar de Evo Morales es menos dictatorial que el de sus compañeros del Alba, también modifico la Constitución para permitirle la primera re-elección, pero como no le ha sido suficiente simplemente busco a unos jueces amigos, previamente nombrados por él, para interpretar la Constitución y permitirle postularse nuevamente.
Lo grave es que no importa que se mueran los tiranos, como paso con Hugo Chávez, como si fueran monarquías hay que respetar la voluntad de sus designios y aceptar sus sucesores.
Gobiernos progresistas como Chile, Uruguay y Brasil pareciera que no le importara que los metan en la misma bolsa que dictaduras como la de Cuba, Venezuela, Nicaragua o Ecuador, porque supuestamente son gobiernos de "izquierda", pero no importa cuanto repitan esa mentira, los autoritarios del Alba no son de izquierda. El silencio complice de Mexico, Colombia, Honduras y Guatemala y la "imparcialidad" del caribe, es una gran tragedia para los que creemos en la democracia y la libertad como bandera.
El "intervencionismo" es visto con un cristal muy opaco, no existe cuando los criminales de Venezuela financian diferentes movimientos, partidos o gobiernos, o se involucran activamente en Ecuador, Bolivia, El Salvador, Nicaragua, Honduras y Paraguay, o cuando Cuba se involucra en Venezuela o Bolivia. No existe intervencionismo cuando Rusia anuncia bases militares en Venezuela. Tampoco pareciera que existiera intervencionismo cuando en Panamá encuentran barcos con armamentos provenientes de Cuba. No hay intervencionismo cuando Venezuela, Ecuador y Nicaragua tratan de eliminar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. No existe intervencionismo cuando directamente el actual “presidente” de Venezuela es encontrado negociando con los militares de Paraguay planificando un golpe de Estado para retornar a Fernando Lugo al poder o cuando directamente viaja a Honduras a tratar de imponer el regreso de Mel Zelaya. Los millones invertidos en la falsa “revolución” regional con petróleo de Venezuela no es intervencionista. Pereciera que el intervencionismo aplica exclusivamente cuando se trata de evitar la violación de derechos humanos en cualquier país donde este un régimen criminal.
El abuso contra la libertad de expresión con la persecución a periodistas, cierres de medios, persecución de la organizaciones de la sociedad civil, intimidación permanente, eliminación de la división de poderes, inexistencia del estado de derecho, abusos generalizados en la gestión pública, violación sistemática de derechos humanos, represión y opresión no pareciera suficiente para que muchos “intelectuales” y mandatarios llamen a estos países dictaduras. La excusa es que han sido electos, pero francamente estas elecciones no pasan el menor examen de independencia, imparcialidad y transparencia, así como tienen vicios de origen con la violación de normas constitucionales o imposición bajo el abuso de poder de una normativa electoral y del candidato eterno.
El estallido de la crisis en Venezuela realmente ha tumbado las caretas de muchos presidentes y gobiernos de las Américas, porque simplemente ni la brutalidad policial y militar de un régimen ilegal/inconstitucional y autoritario, o mejor dicho DICTATORIAL, hacen que se muevan para el rescate de las instituciones democráticas y el apoyo para que acabe la violencia.
Pereciera que el club de presidentes esta para defender a sus miembros, no importa que sean criminales confesos. En el caso de Venezuela, como ha pagado una admisión cara financiando a muchos chulos/as en el poder, hay que tenerle consideraciones especiales.
La no injerencia aplica para que se respete a los miembros del club, cualquier otro intento por el re-establecimiento de la democracia en estos países es más bien sancionado y perseguido, como hemos visto activos a los países cuando se tocan los intereses de sus miembros.
Se dice que la Organización de Estados Americanos esta en grave situación, pero es que podemos esperar cuando no existe liderazgo y los valores democráticos están también en su mínima expresión en los países y lo que reina en la región es un club de presidentes que hasta las formas democráticas han olvidado cuando se trata de sus miembros.
El estallido de la crisis en Venezuela realmente ha tumbado las caretas de muchos presidentes y gobiernos de las Américas, porque simplemente ni la brutalidad policial y militar de un régimen ilegal/inconstitucional y autoritario, o mejor dicho DICTATORIAL, hacen que se muevan para el rescate de las instituciones democráticas y el apoyo para que acabe la violencia.
Pereciera que el club de presidentes esta para defender a sus miembros, no importa que sean criminales confesos. En el caso de Venezuela, como ha pagado una admisión cara financiando a muchos chulos/as en el poder, hay que tenerle consideraciones especiales.
La no injerencia aplica para que se respete a los miembros del club, cualquier otro intento por el re-establecimiento de la democracia en estos países es más bien sancionado y perseguido, como hemos visto activos a los países cuando se tocan los intereses de sus miembros.
Se dice que la Organización de Estados Americanos esta en grave situación, pero es que podemos esperar cuando no existe liderazgo y los valores democráticos están también en su mínima expresión en los países y lo que reina en la región es un club de presidentes que hasta las formas democráticas han olvidado cuando se trata de sus miembros.
La alternativa que deja tanta complicidad es simplemente revelarse a la injusticia y buscar la libertad, "aunque no tengan permiso"...
No comments:
Post a Comment